lunes, 21 de octubre de 2013

La decisión

Sinceramente he dado muchas vueltas a cómo y de que manera debería enfocar mi futuro profesional. Pese a que pueda sonar algo cínico dada la situación de muchos jóvenes, un Ingeniero Informático tiene "demasiadas" opciones al acabar la carrera.

Y digo demasiadas porque aunque el sector disponga según un informe una tasa de paro bajísima [1] , la realidad es que la mayoría de estas ofertas de trabajo no pueden ser consideradas de forma seria.

Pero como la intención de esta entrada no es criticar la precariedad y el intrusismo en nuestro sector, volviendo al tema comentar que cuando me planteé mi futuro en Junio, tenía a la vista tres opciones.

  1. Crear con unos compañeros una sociedad limitada y dedicarme a la creación de aplicaciones móviles, centrándome en Android donde ya tengo una dilatada experiencia.
  2. Hacer carrera en una empresa local, de desarrollo de aplicaciones móviles la cual buscaba alguien con mi perfil.
  3. Esperar a que empezara el curso y confiar en que la idea que sacarían contratos de investigación que comencé a escuchar por Mayo, cuajarían cuanto antes.
¿Cuál era, a priori mi mejor opción? Intentemos llegar juntos a la conclusión que yo llegué de nuevo. Para poneos en situación tengo veinticuatro años, en estos momentos vivo en casa de mis padres, y en esta época me pagaba mis "vicios", con una aplicación en Android Market [2] y haciendo de técnico informático para uno de los restaurantes más importantes de Málaga. Es decir, no necesitaba el dinero con urgencia, por lo que me podía permitir el lujo de evitar las temidas "cárnicas". 

En el caso de la primera la descarté principalmente por una razón, "no metas la polla en la olla". Pese a que son brillantes (con unos expedientes que ya los quisiera yo), mis compañeros empezaban de cero en Android, y yo no tenía claro que el proyecto al que ahora se dedican fuera a gustarme como para echarle ocho horas al día. ¿Se podría haber resuelto de mejor manera? Posiblemente sí, pero tomé la opción más sencilla, no molestar. Confío en que algún día me pase como a Roland Wayne, desde aquí, les deseo lo mejor.

La segunda no fue una decisión muy complicada, pese a ofrecerme un buen puesto de trabajo como primer empleo, no veía del todo claro si aguantaría, después de tantas horas con el simulador abierto, un año programando en Android, pero sobretodo tenía la incertidumbre de cual sería mi proyección de futuro, ya que la empresa es muy pequeña en tamaño y las posibilidades de promocionar son prácticamente nulas. 

Como ya solo quedaba una, no tenía más alternativa que apostar todo al mismo color y cruzar los dedos... (Es broma, no ha sido tan dramático en realidad).

Quizás os estéis preguntando por qué no me he planteado marcharme, pero esto, junto con los pros y contras de la tercera opción, lo dejo para después de la publicidad.

Firmado: 
El investigador sin bata.



[1] http://coddii.org/wp-content/uploads/2012/07/INFORME-EMPLEABILIDAD-2012.pdf
[2] http://play.google.com/store/apps/details?id=com.oledev.icotilleoslite

No hay comentarios:

Publicar un comentario